Me apasiona conocer a las personas y ayudarles a encontrar su elemento de identidad, me sumerjo en un mundo de excepción, el universo de los símbolos, y su corazón palpitante. Es la antesala de los bocetos, donde cada trazo es sagrado. Un espacio único de introspección que está lleno de luz, es donde pongo alma y corazón al servicio de la joya hasta ir completando cada una de las fases de su creación para darle vida.